La Fiscalía General de Rusia abrió el caso bajo el artículo 279 del Código Penal ruso el viernes por la noche, cuando Prigozhin y sus hombres anunciaron que habían cruzado desde Ucrania la frontera rusa en la región de Rostov, en el sur, y que habían iniciado una "marcha por la justicia" hacia Moscú tras denunciar un ataque del Ejército ruso contra un campamento de los mercenarios en la retaguardia rusa.
Ahora, según avanza el diario Kommersant, y en contra de las informaciones dadas por el Kremlin, el caso penal por organización de rebelión armada seguiría abierto contra el jefe del grupo de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin. El Kremlin había asegurado que el empresario no será perseguido judicialmente y que se irá al exilio en Bielorrusia.
Mientras, desde EEUU, el secretario de Estado Antony Blinken cree que aún no hemos visto "el acto final" de la crisis interna en Rusia, que a su juicio podría afectar a las capacidades militares de Moscú en Ucrania.