El gigante gasístico ruso Gazpromha cortado ya "por completo" el suministro de gas a las compañías Ørsted, principal grupo energético de Dinamarca, y a Shell Energy Europe, que suministra gas a Alemania, por negarse a pagar por el combustible en rublos, tal y como exige Vladímir Putin.

La víspera, Gazprom ya anticipó que iba a cortar el suministro a estas dos compañías y este miércoles ha confirmado la suspensión total de las entregas en sendos comunicados difundidos en su cuenta de Telegram.

En el caso de Ørsted, el año pasado la gasística rusa le suministró 1.970 millones de metros cúbicos de gas, lo que supone aproximadamente dos tercios del consumo total de Dinamarca. Por su parte, el contrato con Shell para el abastecimiento de gas a Alemania preveía el suministro de hasta 1.200 millones de metros cúbicos al año.

Desde el pasado 1 de abril, Rusia obliga a pagar por el gas de Gazprom en rublos a todos los clientes extranjeros de países que considera "inamistosos" por las sancionescontra Moscú por su invasión de Ucrania, lo que incluye a todos los miembros de la Unión Europea. Gazprom ya ha cortado el gas a Países Bajos, Polonia, Bulgaria y Finlandia por este mismo motivo.

El esquema ideado por Putin para esquivar las sanciones occidentales exige a los países "inamistosos" la apertura de dos cuentas especiales en Gazprombank. En una deben ingresar el dinero por el gas ruso recibido en euros o dólares, que luego es convertido en rublos en la Bolsa de Moscú y transferido a la segunda cuenta en la divisa nacional de Rusia.