Ocho aeropuertos franceses han sido parcial o totalmente evacuados en la mañana de este miércoles por alertas de bomba, en un contexto marcado por la elevación del riesgo de atentados en el país a causa de la crisis en Oriente Medio y del atentado yihadistadel pasado viernes en un liceo de la ciudad de Arras.

Un portavoz de la Dirección General de la Aviación Civil citado por Efe advertía de que el número de aeropuertos afectados podía seguir creciendo durante el día, pero que hasta mediodía había habido desalojos al menos en los de Niza, Beauvais, Lyon-Bron, Toulouse, Lille, Nantes, Rennes y Biarritz. No se trata de una amenaza global, sino de mensajes que se han ido recibiendo para cada uno de ellos, precisaba el portavoz, que reconoció no saber si proceden de la misma fuente.

El aeropuerto de Lille, en el norte de Francia, ha sido evacuado debido a un aviso de bomba, según informó este miércoles el aeropuerto en la plataforma X. "Los equipos de seguridad del Estado están en el lugar", comunicó la citada fuente.

El aeropuerto de Toulouse cierra el tráfico aéreo

Los aeropuertos de Toulouse, Niza y Lyon también fueron evacuados el miércoles por alertas de seguridad, según BFM TV, citando fuentes policiales. Por su parte, el aeropuerto de Toulouse ha comunicado en su cuenta de Twitter que "está sufriendo actualmente una amenaza de bomba que afecta al horario de vuelos y a los servicios de la terminal". Sus instalaciones han suido evacuadas y se ha interrumpido el tráfico aéreo por tiempo indefinido.

El aeropuerto de Biarritz, por contra, ha decidido evacuar la terminal de forma "preventiva" a pesar de que no se han notificado amenazas. El de Niza ya ha vuelto a la normalidad tras informar en su cuenta de la red social X que el perímetro de seguridad ya ha sido retirado tras analizar una bolsa sospechosa que había sido abandonada. La situación allí ya ha vuelto a la normalidad en Lyon y Lille, a pesar de los imprevistos.

Francia se encuentra en su máximo estado de alerta tras el asesinato de un profesor el 13 de octubre en un presunto atentado islamista. El Palacio de Versalles tuvo que ser evacuado este miércoles por una amenaza de bomba, la tercera vez desde el sábado pasado.

El Gobierno francés tiene movilizados a 10.000 policías y gendarmes tras haber subido la alerta antiterrorista al nivel de urgencia atentados, que ha supuesto además que las fuerzas del orden reciben el apoyo de 7.000 militares de la misión Centinela.