Según la gendarmería, el sujeto habría proferido “una amenaza bastante precisa a las fuerzas de seguridad frente a un café, y ha sido visto en las murallas de la ciudad”. Sin conocer si el hombre va armado o no, las fuerzas del orden han preferido, “por el bien de la seguridad, cerrar la abadía, donde hay servicios religiosos y evacuar el Monte”.
La importante operación de búsqueda trata de encontrar al individuo rastreando incluso casa por casa, aunque cabría la posibilidad, según ha admitido la policía, de que hubiera salido del emplazamiento con el flujo de turistas que ha sido evacuado.