Nuevo partido
Qué es Se acabó la fiesta, el partido del agitador de extrema derecha Alvise Pérez que entra en el Parlamento Europeo
La agrupación de electores está liderada por Luis Pérez, conocido como Alvise en las redes sociales, lugar donde se hizo famosos difundiendo desinformación. Pérez está involucrado en múltiples procesos judiciales y en algunos ha llegado a estar condenado.
La agrupación de electores denominada Se Acabó la Fiesta, que se ha presentado por primera vez a unos comicios, ha conseguir entrar en el Parlamento Europeo con tres escaños en estas elecciones europeas del 9 de junio. Esta organización está liderada por Luis Pérez Fernández, un agitador de extrema derecha conocido en redes sociales como 'Alvise' y que se encuentra inmerso en numerosos procesos judiciales. Su formación ha reunido cerca de 800.000 votos y un 4,58 % de los votos españoles.
¿Quién es Alvise y por qué se le conoce?
El fundador de Se Acabó la Fiesta es conocido sobre todo por su actividad en las redes sociales bajo el nombre de Alvise. El nombre de este usuario de redes sociales sevillano suele aparecer a menudo relacionado con publicaciones polémicas y con la difusión de bulos sobre políticos, periodistas y otros personajes públicos. Pérez tiene miles de seguidores en redes sociales y se denomina a sí mismo como creador de contenidos y como un analista que "persigue corruptos y criminales".
Aunque es la primera ocasión en la que se presenta liderando una formación, su relación con la política no es nueva. Alvise estuvo afiliado a la desaparecida Unión, Progreso y Democracia (UPyD) y después, en 2017, se unió a Ciudadanos. Con el partido naranja consiguió ejercer de asesor del equipo de Toni Cantó y de jefe de gabinete del grupo parlamentario en las Cortes Valencianas hasta su destitución en 2019.
Implicado en procesos judiciales
Su alta actividad en las redes sociales como difusor de bulos y de desinformación le han terminado causando no pocos problemas judiciales e incluso ha resultado condenado en algunas de las causas en las que ha estado implicado.
No hay que irse muy lejos para encontrar importantes condenas en su contra. En marzo de 2023, Pérez fue declarado culpable de intromisión del derecho al honor de la exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. El agitador había difundido varios tuits durante la pandemia en los que acusaba a Carmena de "haber recibido en su casa un respirador personal de la empresa 'VitalAire' para evitar acudir a un hospital público y hacer cola como el resto de españoles". El juez condenó a Alvise a retirar los tweets, publicar la sentencia y a pagar una indemnización de 5.000 euros a la exalcaldesa.
En ese mismo año, apenas unos meses después, la Audiencia Provincial de Madrid condenó a Alvise a pagar 10.000 euros a la periodista Ana Pastor por intromisión ilegítima de su derecho a la propia imagen. Alvise había publicado en sus redes sociales fotografías de la periodista que formaban parte de su ámbito privado.
Alvise también tuvo que admitir en sede judicial que había publicado una información falsa sobre Salvador Illa durante la pandemia. El agitador publicó los supeustos resultados de una PCR positiva de covid-19 perteneciente al entonces ministro Sanidad. Dicha información era falsa y Alvise admitió que no había comprobado la veracidad de su publicación.
El agitador de extrema derecha también fue condenado por publicar imágenes en redes sociales del exministro José Luis Ábalos sacadas sin su consentimiento en su hogar y junto a un mensaje que insinuaba que tenía problemas de "salud mental". La condena implicada una indemnización de 60.000 euros a Ábalos, pero en septiembre de 2023 la Audiencia Provincial de Madrid decidió anular la sentencia por errores del juzgado de primera instancia en las notificaciones al demandado, lo que obliga a una repetición del juicio.
¿Por qué se presenta Alvise al 9J?
Tras conseguir una gran popularidad a base de polarizar con su publicaciones ultras y conspiracionistas, lo ciertos es que Luis Pérez no pretende trasladarse a Bruselas con el escaño conseguido, según ha mencionado en entrevistas. Lo que argumenta con su candidatura en Bruselas es que buscaba "protegerse judicialmente" y tener "un privilegio político que no tienen los ciudadanos", pues los eurodiputados tienen inmunidad parlamentaria y aforamiento.
En cuanto a su plataforma, su web básicamente es un enlace a sus canales de redes sociales y no tiene un programa electoral en el que consultar su propuesta. En sus publicaciones ha defendido, entre otros discursos, proclamas antiinmigración. Además, en su tono conspiracionista cuestiona el recuento electoral y promueve un recuento paralelo con un bot del que no se explica el método. Si nos basamos en las publicaciones de sus redes sociales.