Más de 10.000 jóvenes se han beneficiado en Ciudad Real de un proyecto de integración y convivencia del Parlamento Europeo cuyo objetivo principal se basa en convivir con otras realidades para fomentar la inclusión y el respeto de personas con diferentes realidades. El proyecto comienza con la búsqueda en parques y zonas de ocio de jóvenes en situación de riesgo.

Era el caso, por ejemplo, de Ismael Ajjaji Kayna, que a pesar de que ahora camina hacia una meta definida, en su adolescencia no lo tuvo nada fácil. "Vengo de una familia marroquí y es una etiqueta que se queda", ha explicado el joven a laSexta.

A esta situación se sumaba que, al vivir en muchas ciudades, no pudo hacer muchos amigos por el camino. Así, se encontró con Empu-G, un programa de la provincia de Ciudad Real que ayuda a jóvenes en situaciones de riesgo, y con el que consiguió formarse como educador social.

Ahora, con su experiencia ayuda a jóvenes como Alexandra, refugiada ucraniana que huyó de la guerra hace poco más de un año. Gracias al proyecto, estos jóvenes han compartido días de convivencia en un programa que ha mezclado realidades distintas y que han situado la empatía en el centro.

El éxito del proyecto ha propiciado que el Parlamento Europeo lo haya galardonado con el Premio al Ciudadano Europeo tras ayudar ya a más de 10.000 jóvenes de la provincia dotándoles de herramientas para que puedan tomar las decisiones correctas.