Endesa ha decidido no proceder a ningún corte de la luz por impago de la factura eléctrica ante la situación excepcional motivada por la pandemia del coronavirus.

Con esta medida la empresa tranquiliza a sus clientes ante las dificultades que se puedan ocasionarse por esta crisis a la hora de la tramitación del abono del recibo en el día a día.

La compañía energética ha implementado un paquete de medidas para minimizar el riesgo de contagio del Covid-19 con el objetivo de garantizar la continuidad y calidad de sus servicios, proteger la salud de sus empleados y facilitar la conciliación.

Entre ellas figuran la implementación de medidas adicionales para garantizar el suministro, la instauración del teletrabajo o la restricción de viajes y promoción de la comunicación digital, entre otras.

Iberdrola permitirá fraccionar facturas hasta en 12 meses

Por su parte, Iberdrola ha lanzado un plan de ayuda para facilitar el pago de las facturas de luz, gas y otros servicios energéticos.

Según informó la eléctrica, la iniciativa, dirigida tanto a hogares, como a pymes y autónomos, permitirá la flexibilización de los pagos, mediante el fraccionamiento de las facturas hasta en 12 meses y sin coste, a todos los clientes con dificultades que lo soliciten. En este contexto, los planes de Iberdrola incluirán dos líneas de acción adicionales.

Por una parte, la compañía ha puesto en marcha un plan de contingencia con diferentes actuaciones, con el que reforzará sus canales digitales y telefónicos para asegurar el servicio de atención y asesoramiento a sus clientes.

Asimismo, va a activar de forma proactiva un plan de asesoramiento para ayudar a sus clientes a adaptar su tarifa a sus nuevos hábitos de consumo en la situación actual.

Iberdrola ha implementado una batería de medidas en todos sus centros de trabajo (oficinas, instalaciones de transformación, centrales de generación y centros de atención al cliente), reforzadas y específicas, que permiten asegurar el suministro y la continuidad de sus actividades.

Las medidas incluyen protocolos extraordinarios para colectivos críticos de los negocios, esquemas de movilidad eventual y reubicación temporal de trabajadores de instalaciones o funciones esenciales en la generación, distribución y suministro eléctrico a clientes.