El candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Joe Biden, ha comparecido ante los medios desde el Chase Center de Wilmington (Delaware) para proclamar lo que, ha dicho, será una victoria cuando acabe el recuento.
Al ganar en los estados clave de Michigan y Wisconsin, el candidato demócrata espera la confirmación de su victoria en Arizona para quedarse muy cerca de la presidencia. De esta manera, solo necesitaría conquistar al menos uno de los cuatro estados clave que quedarían en juego: Pensilvania, Carolina del Norte, Georgia y Nevada.
"Cuando el recuento termine creemos que seremos ganadores", ha asegurado Biden, que ha insistido en que "todos los votos se deben contar" en una jornada post-electoral en la que el hasta ahora presidente Donald Trump ha insinuado la existencia de un "fraude electoral".
"No somos enemigos. Dejadme ser claro, hice una campaña como demócrata, pero gobernaré como un presidente americano", ha explicado en un discurso en el que ha señalado la necesidad de que la nación esté unida, y tras las duras acusaciones de Donald Trump sembrando la duda de un posible 'pucherazo' en las elecciones presidenciales.
En este sentido, el candidato a la Casa Blanca ha lanzado varios mensajes a su opositor: "Nadie nos va a quitar nuestra democracia, ni ahora ni nunca", ha afirmado tras una jornada en la que Trump ha puesto en duda numerosas veces por redes sociales la legitimidad de los resultados. Un hecho que ya vaticinó el propio republicano cuando admitió, horas antes del recuento, que "ganar es fácil, pero perder no lo es". Desde entonces, a golpe de tuit y sin pruebas, Trump ha achacado su derrota temporal a un fraude electoral.
"Nadie nos va a quitar nuestra democracia, ni ahora ni nunca"
Actualmente continúa el recuento en estados 'bisagra' que podrían dar un vuelco a los resultados provisionales. Por el momento, el candidato demócrata ha aumentado la distancia respecto a Donald Trump.
Al cierre de los colegios electorales, Trump comparecía en la Casa Blanca para anunciar su victoria. Un anuncio cargado de teorías conspiratorias respecto al recuento y que ya vaticinaba un posible vuelco en la madrugada, ya que aun quedaban millones de votos por contar. "Hemos ganado Florida, Texas. También está claro que hemos ganado Georgia. Hemos ganado claramente Carolina del Norte. Pero más importante, estamos ganando Pensilvania por un tremendo margen de votos. Ganamos Michigan también por casi 300.000 votos. Y Wisconsin. No necesitamos todos", anunciaba.
Tras una noche electoral con un recuento muy igualado y que deja las puertas abiertas a una victoria de cualquiera de los candidatos, el republicano ha exigido el cese del recuento en Michigan y ha anunciado que reclamará el recuento de Wisconsin. Incluso ha afirmado que recurrirá ante el Tribunal Supremo los resultados de las elecciones presidenciales, un anuncio que ha sido criticado por algunos de sus compañeros del Partido Republicano. Asimismo, Biden ha afirmado estar "preparando" a su equipo legal ante una posible demanda de Trump.