El presidente de Argelia, Buteflika, pierde el apoyo del ejercito. El jefe de las fuerzas armadas y mano derecha del dirigente ha pedido su inhabilitación por incapacidad para ejercer sus funciones.
En un discurso transmitido por la televisión pública, el general Ahmed Gaid Salá ha dicho que, a la vista de las manifestaciones "pacíficas" contra la continuidad del presidente del país, Abdelaziz Buteflika, y la crisis política que vive Argelia, la solución debe llegar del marco constitucional, por lo que ha abogado por aplicar el artículo 102 de la Constitución.
El general ha destacado el carácter pacífico de las protestas, "que demuestran la grandeza del pueblo argelino, su conciencia y madurez", y ha advertido de que esas movilizaciones podrían ser "explotadas" por sectores "maliciosos y hostiles", "de dentro y de fuera del país", que "usan maniobras dudosas para atacar la estabilidad" de Argelia.
En este sentido, el jefe del Ejército argelino ha dicho que para evitar que el país caiga en "una situación incierta" hay que defender los "intereses supremos" de Argelia y buscar una solución "a la crisis" dentro del "marco constitucional", que es la "única garantía para la preservación de una situación política estable".
El artículo 102 de la Constitución argelina establece que en caso de una enfermedad grave y duradera el presidente de la república puede ser inhabilitado por el Consejo Constitucional cuando se constate su incapacidad para ejercer sus funciones, tras lo que debe ratificarlo el Parlamento.
El primer paso sería aprobar una inhabilitación temporal por un periodo de 45 días y, cumplido este tiempo, se podría declarar la incapacidad definitiva por un periodo de 90 días, en el que debería organizarse la convocatoria de elecciones presidenciales, según 'Tout sur l'Algerie'. Algo que pide el pueblo argelino desde hace más de un mes en las calles.