Una niña de nueve años ha sido forzada a casarse con un hombre de 28. Esto sigue ocurriendo; es real, en pleno siglo XXI. En vez de dejarlas ser niñas, jugar y aprender, 650 millones de menores son forzadas a ser adultas de la manera más salvaje.

Es el caso de Kadiatu Massaquoi, de Sierra Leona. A los 15 años la obligaron a casarse tras quedar embarazada. "Me hicieron sentir vacía, como si no sirviera para nada", contó a laSexta Kadiatu. Ahora, con solo 17 años, tiene ya dos hijos. Y puerta a puerta, recorre su comunidad, en Sierra Leona, advirtiendo de los peligros del matrimonio forzado

No es el único caso: también sufren exclusión social, abandono escolar y, sobre todo, violencia. Hadiqa Bashir lo aprendió con siete años en Pakistán, tras la boda de su mejor amiga, de ocho: al castigo del matrimonio forzado tuvo que sumar los malos tratos del hombre con el que la casaron.

"Su marido la golpeó con una barra de hierro", contó a laSexta Hadiqa, ahora activista contra el matrimonio forzado. A los 11 años quisieron casarla a ella con un taxista de 35 años, pero consiguió evitarlo. Desde entonces, lucha por los derechos de las niñas.

La educación es la clave para escapar del oscuro futuro que les han querido imponer.