John Walker Lindh, el estadounidense que a comienzos de siglo copó las portadas de medio mundo tras ser capturado en Afganistán por formar parte de los talibanes, fue puesto en libertad tras pasar 17 años en prisión, decisión que ha generado gran polémica.

Lindh, conocido como 'el talibán estadounidense', fue condenado en 2002 a 20 años de prisión tras declararse culpable de los cargos de prestar servicio al grupo insurgente y de manejo de explosivos.

Tras cumplir los últimos años de su condena en la penitenciaria de Terre Haute, en el estado de Indiana, Lindh ha visto reducida su pena en tres años por buena conducta.

A pesar de este hecho, a sus 38 años, Lindh deberá de pasar los próximos años en libertad bajo vigilancia y sometido a un control poco habitual en este tipo de situaciones, puesto que no está claro si aún profesa la misma ideología radical que, en el año 2000, le llevó a viajar a Pakistán para unirse a los talibanes.