De acuerdo con el semanario alemán "Der Spiegel", el espionaje estadounidense habría creado un banco de datos para este cometido, concentrado en el flujo de información de todo tipo de operaciones, sea a través de bancos o de tarjetas, especialmente las Visa.

Este apartado, que "Spiegel" califica con el nombre "Follow the Money", estaría encargado de ese flujo de información, que quedaría almacenada en el banco bautizado como "Tracfin".

El cómputo de pagos captados por el sistema, en 2011, se evalúa en 180 millones, un 84 % de los cuales correspondería a los efectuados con tarjeta de crédito. El objetivo prioritario de estas operaciones son las transacciones de clientes en Europa, Oriente Medio y África, siempre de acuerdo con ese medio.

El banco de datos "Tracfin" habría captado asimismo información procedente del sistema Swift, centralizado en Bruselas y a través del cual se canalizan transacciones internacionales. "Der Spiegel" advierte que la captación de este flujo de pagos podría tener consecuencias y que el Parlamento Europeo (PE), como la Comisión Europea (CE) advirtieron ya a raíz de las numerosas informaciones sobre las operaciones de la NSA con una eventual suspensión del llamado acuerdo Swift.

Desde 2010 se transmiten ciertas informaciones a las autoridades de Estados Unidos, aunque éstas están sujetas a rigurosas medidas de protección de datos. La información de la publicación alemana se añade al cómputo, casi semanal, de revelaciones de ese medio acerca de las actividades de la NSA y el presunto espionaje masivo de datos personales de todo el mundo.