El general Joseph Votel,
jefe de la Comandancia Central del Ejército norteamericano, también ha
explicado que las tropas en Irak continuarán en el terreno durante una buena
temporada. "No queremos mantener a soldados en el terreno que no
necesitamos y sin una misión válida", ha emplazado.
El pasado diciembre, el
presidente estadounidense, Donald Trump, sorprendió a sus aliados, e incluso a
algunos miembros de su Administración, al anunciar la retirada de los 2.000
efectivos en Siria, argumentando que la misión de derrotar a Estado Islámico ya
se había cumplido.
Entonces, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una coalición de milicias lideradas por las fuerzas kurdas sirias y apoyadas por Estados Unidos, advirtieron a Trump de que la salida de las tropas estadounidenses podría llevar al resurgir de Estado Islámico.