Un pirómano ha sido captado por un dron mientras provocaba incendios en un cañaveral del sur de Italia, en la región de Calabria, donde se han desplegado una treintena de drones como forma de disuasión y para identificar a los responsables de las llamas que arden estos días en el país transalpino. En el vídeo aparece un hombre quemando varias plantas hasta que se percata de que está siendo grabado por un dron y trata de hacer caer el aparato arrojando piedras contra él.
"Calabria es una región civilizada pero también tiene algunos imbéciles que van a provocar fuegos en el bosque", ha denunciado el presidente regional, Roberto Occhiuto, que ha compartido el vídeo en sus rede sociales y ha advertido de que las penas por este delito pueden llegar hasta los siete años de prisión. "Prende el fuego, luego ve el dron e intenta derribarlo con piedras, pero ¿de dónde sale? ¿de las cuevas?", ha aseverado sobre pirómano, que ya ha sido identificado y denunciado, de acuerdo con el presidente calabrés.
El indignante vídeo ha visto la luz precisamente en un momento en que el sur de Italia sufre devastadores incendiostras una semana con temperaturas que han alcanzado los 46 grados por la ola de calor Caronte. Una de las zonas más afectadas es Sicilia, donde varias personas han fallecido y más de 2.000 han tenido que ser desalojadas. Allí, las llamas se acercaron tanto a la ciudad de Palermo que su aeropuerto tuvo que ser desalojado durante toda la mañana del martes.
También en las inmediaciones de Catania, la segunda ciudad más poblada de Sicilia, las llamas han llegado a zonas habitadas y arrasado palmeras en calles urbanizadas, jardines y viviendas, donde tampoco hay agua ni electricidad por culpa del intenso calor que está provocando sobrecargas en los servicios eléctricos. Las autoridades sanitarias incluso han tenido que pedir a las población que no salga de sus casas debido a que el aire es irrespirable por el humo y la ceniza.
La primera ministra, Giorgia Meloni, ha avanzado y que Italia declarará el estado de emergencia no solo por los incendios, sino también por las violentas tormentas que ha sufrido el norte del país, con ciclones, tornados y granizadas que se han saldado con dos víctimas mortales por caída de árboles: una mujer de 58 años y una adolescente de 16.