La última vez que le vimos con vida, Jamal Khashoggi entraba por la puerta del consulado de Arabia Saudí en Estambul, donde era grabado por las cámaras de seguridad.

Poco después sale un hombre con su ropa, pero claramente es un doble, parte de una burda escenografía orquestada por los asesinos del periodista. Un crimen que, todavía, un año después, sigue lleno de incógnitas.

¿Dónde está el cuerpo?

Gracias al servicio de espionaje turco sabemos que el asesinato fue perpetrado por un comando asesino, un equipo de 15 personas llegadas desde Arabia Saudí, incluidos miembros del servicio secreto, que esperaban al periodista, al que drogaron y asfixiaron.

A continuación, su cuerpo fue descuartizado. Lo que pasó después sigue siendo un misterio, y se priorizan dos teorías: que los restos del cadáver fueron disueltos en ácido o bien que fueran quemados en un hornillo.

¿Dónde están los responsables?

Arabia Saudí anunció la detención de 18 personas en relación con la muerte de Khashoggi, 11 de las cuales fueron imputadas. Del resto no se sabe nada. En el juicio se pidió la pena de muerte para cinco personas, pero no se han desvelado sus identidades.

¿Cuál es el papel del príncipe saudí?

Mohamed bin Salman aseguró que no sabía nada. Hace unos días, admitía su responsabilidad, relativamente. "Como líder debo admitir mi responsabilidad", afirmó.

El príncipe heredero se hace responsable por estar al mando, pero mantiene su versión de que no ordenó el asesinato, ni lo supo. Sin embargo, las investigaciones apuntan directamente a él.

"Todo apunta a que el hombre fuerte de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman, está detrás de esto", asegura Alfonso Armada, presidente de Reporteros Sin Fronteras España.

Así lo han recordado en el aniversario de la desaparición del periodista en protestas convocadas frente legaciones saudíes en varios países, también frente a la embajada en Madrid, para pedir respuestas.