Trump llega a Texas acompañado de su mujer para reunirse con los afectados. Él mismo ha querido compartir el momento con un vídeo colgado en Twitter con el eslogan América ama a Texas. Responde así a las críticas por no visitar a las víctimas en su anterior viaje a la zona.

El presidente y la primera dama llegan a un Houston que intenta recuperar poco a poco la normalidad ahora que ya han dicho adiós a Harvey. "Estamos emocionados de volver a poner en marcha nuestro negocio", comenta uno de los afectados por el huracán.

En las zonas menos afectadas comienzan a abrir tiendas y carreteras, cientos de miles de personas han regresado ya a sus casas, si es que queda algo de ellas. "Nuestra casa está destruida", afirma una de las afectadas. La suya es una de las 9.000 viviendas que se han venido abajo en todo Texas.

Otras siguen totalmente inundadas y, según el alcalde, podrían seguir así 15 días más. Por eso los equipos de rescate siguen trabajando para sacar de allí a los que quedaron atrapados por el agua.

Todo el país se está volcando para atender a los afectados. En Nueva York saben bien lo que significa sufrir un gran huracán, por eso las víctimas de Sandy también han querido aportar su granito de arena. "Entendemos por lo que está pasando la gente en Texas", asegura un afectado por el huracán Sandy.

Trump ya ha pedido al Congreso que dedique casi 7.000 millones de euros para atender a los afectados, es sólo una pequeña parte de lo que hará falta para hacer frente a los daños causados por Harvey. Basta ver el antes y el después para darse cuenta de que llevará años recuperar lo perdido.