El director de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA), el exgeneral David Petraeus, ha anunciado que ha presentado su renuncia al presidente, Barack Obama, por haber tenido una relación extramatrimonial y le fue aceptada.
En la carta de renuncia, Petraeus señaló que ha estado casado durante 37 años y que el haber sido infiel a su esposa muestra un "criterio extremadamente pobre" y un "comportamiento inaceptable tanto como esposo como líder de una organización" de las características de la CIA.
Obama confirmó minutos más tarde de darse a conocer la noticia que había aceptado la renuncia de Petraeus, al que agradeció su "extraordinario servicio" al país durante décadas.
"Hoy, acepté la renuncia del director de la CIA. Confío plenamente en que la CIA continuará prosperando y llevando a cabo su misión esencial", explicó Obama en un comunicado divulgado por la Casa Blanca.
Tras conocerse la renuncia, el Comité de Inteligencia del Senado confirmó que Petraeus no comparecerá la semana próxima ante la cámara, en una audiencia programada para tratar el atentado terrorista que sufrió el pasado 11 de septiembre el consulado estadounidense en Bengasi (Libia).
La sorprendente renuncia se ha producido apenas unos días después de la reelección de Obama y no se conocen más detalles del caso. Algunos medios de comunicación estadounidenses, como la CNN, se preguntan si la renuncia no estará relacionada en realidad con lo ocurrido en Libia.
Mientras tanto, al mando de la CIA queda el subdirector de la Agencia, Michael Morrell, al que ya han apuntado varios medios como candidato para suceder al exmilitar, y en cuya labor interina Obama dijo "confiar plenamente".
Morrell, experimentado analista de la CIA, estaba con el presidente George W. Bush el 11 de septiembre de 2001 y se encontraba en la Sala de Crisis de la Casa Blanca el 1 de mayo de 2011, como subdirector de la CIA, cuando las fuerzas especiales acabaron con la vida de Osama bin Laden en Pakistán.