Un grupo de diputados conservadores de Reino Unido han acusado a la diputada laborista Angela Rayner de distraer al primer ministro británico, Boris Johnson, cruzando y abriendo las piernas durante sus intervenciones en el Parlamento.

Estas acusaciones se habrían vertido de forma anónima a través de un reportaje publicado en el Daily Mail, donde sin desvelar nombres se afirmaba que a Rayner "le gusta distraer al primer ministro cuando está en la tribuna" al etilo de "la infame escena de Sharon Stone en la película de 1992 'Instinto básico'".

"Ella sabe que no puede competir con el entrenamiento de oratoria de Oxford Union de Boris, pero tiene otras habilidades de las que él carece", llegó a declarar otro de los diputados anónimos al citado medio.

Las desagradables declaraciones han contado incluso con la crítica y el reproche del propio Johnson, quien ha calificado estos comentarios de misóginos. "Por mucho que no esté de acuerdo con Angela Rayner en casi todos los temas políticos, la respeto como parlamentaria y deploro la misoginia dirigida contra ella de forma anónima", ha defendido en su perfil de Twitter. El primer ministro también habría contactado con ella en privado para mostrarle su apoyo.

En cuanto a la propia Rayner ha destacado que este es solo un ejemplo más del "sexismo y la misoginia" a la que las mujeres se enfrentan todos los días en política. Considera además que estas "mentiras" que se han vertido sobre ella son un pretexto de los conservadores para "salvar el pellejo" de Johnson, involucrado en los escándalos de las fiestas durante la pandemia de coronavirus.