El mundo grita contra la violencia policial pidiendo justicia para George Floyd, muerto a manos de un policía que le asfixió con la pierna durante más de ocho minutos. En París, miles de personas han ocupado las calles: "Hemos decidido venir para protestar contra el racismo y contra la violencia policial que quedan impunes en Francia".

Es el mismo mensaje que lanza Miriam, que recuerda a los que han sufrido alguna vez la represión policial: "Por eso decimos que el Estado en Francia es racista y no quieren verlo". Se trata de una manifestación no autorizada por la pandemia de coronavirus y para evitar que se repitan los disturbios del pasado martes.

La lluvia tampoco ha evitado que miles de personas en Londres hayan reivindicado puño en alto y en silencio la figura de Floyd en los alrededores del Parlamento Británico. También se han dado multitud de protestas en diferentes ciudades de Alemania. Se han recorrido las calles de Berlín, Munich o Dresde.

En Sydney se han vivido momentos de tensión que han terminado con la policía reprimiendo a los manifestantes. Así ha sido el episodio al final de una multitudinaria manifestación pacífica que ha ocupado las calles de la capital australiana. Por su parte, en fila y custodiados por la policía, cerca de 500 personas han marchado por Tokio en recuerdo a Floyd.

También en Corea del Sur, donde aseguran que es estos movimientos son importantes y se hacen también allí "porque el racismo no está solo en Estados Unidos". En el país asiático, docenas de activistas y ciudadanos han marchado contra brutalidad policial con máscaras negras, recordando que ellos tampoco pueden respirar.