Los colegios electorales están abiertos en Crimea para que los ciudadanos voten en referéndum si desean volver a depender de Moscú o unirse a la Constitución de 1992 dentro de Ucrania. Los soldados rusos controlan las zonas estratégicas mientras la península ucraniana vive una jornada histórica en la que los favorables a Kiev se resignan y el miedo aumenta por la crecida tensión militar.