Dentro del crucero Diamond Princess estuvieron más de 350 personas infectadas por coronavirus, lo que obligo a la tripulación y pasajeros a estar en cuarentena a bordo durante dos semanas atracados en el puerto de Yokohama, en Japón.

Sin embargo, una vez los pasajeros desembarcaron, el virus siguió en el crucero durante 17 días más, según publica el medio CNBC citando un [[LINK:EXTERNO||| https://www.cdc.gov/mmwr/volumes/69/wr/mm6912e3.htm?s_cid=mm6912e3_w|||estudio del Centro de Control y Prevención]] de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.

"El COVID-19 se identificó en una gran variedad de superficies en los camarotes de pasajeros contagiados, ya sean sintomáticos o asintomáticos, hasta 17 días después de que las cabinas fueran desocupadas en el Diamond Princess, pero antes de que se llevaran a cabo los procedimientos de desinfección", explica el informe.

El fin del estudio era determinar cómo se produjeron y controlaron los brotes de COVID-19 en diferentes cruceros. "El coronavirus en los cruceros supone un riesgo de expansión rápida de la enfermedad, provocando brotes en una población vulnerable, y se requieren esfuerzos agresivos contener el contagio", detalla el CDC, que insta a las personas de riesgo a no embarcarse en estos durante la pandemia.

Además, la supervivencia del virus a la cuarentena en algunas superficies a la cuarentena pone en relieve la importancia de desinfectar y limpiar los espacios incluso después de la cuarentena.