El camión salió de la calzada a las 20.15 horas en la avenida Kurfuerstendamm con el objetivo de arrollar a las personas que se encontraban allí. Según las investigaciones, el camión circulaba a 65 km por hora y recorrió 50 metros.
El camión, que penetró con las luces apagadas en el mercado, llevaba matrícula polaca y transportaba vigas de acero, según informó la policía alemana. Además, el atacante robó el vehículo al conductor.
"Un camión negro ha entrado a toda hostia, cargándose par de casetas y arrollando a todo el mundo. Me ha arrollado y atropellado ambas piernas", declaraba Iñaki, el español herido en el atentado.