Tensión este martes en Roma, donde se han producido enfrentamientos entre la Policía y hosteleros y trabajadores de otros sectores considerados no esenciales -como gimnasios o vendedores ambulantes-, que protestaban ante el Parlamento italiano por el cierre de sus negocios por la pandemia de coronavirus.

Los choques se han producido después de que varias personas intentasen atravesar las barreras policiales de protección frente a la Cámara Baja, mientras algunos manifestantes comenzaban a lanzar objetos.

Los antidisturbios, por su parte, han respondido con botes de humo y han detenido a algunos manifestantes. De acuerdo con medios italianos citados por la agencia Efe, un agente resultó herido.

Las movilizaciones se han repetido también en otros puntos del país, como en Nápoles, donde los manifestantes han bloqueado la carretera provocando tres kilómetros de retenciones.

En Milán, también se han vivido momentos de tensión en la protesta de los comerciantes, en la que también había trabajadores del sector turístico. Los manifestantes quisieron desplazarse en comitiva desde la Estación Central hacia la Prefectura, pero se detuvieron al pasar frente a la sede del Gobierno central y bloquearon el tráfico.

También varios cientos de comerciantes ambulantes han salido a protestar en Bari, al sur del país, para reclamar la reapertura de los mercados, reunidos con sus furgonetas en una zona de comercio de la ciudad.

En Turín, en cambio, está previsto que las mayores protestas se produzcan este miércoles, cuando los manifestantes tienen previsto marchar ante un tribunal para pedir justicia para quienes continúan con sus negocios cerrados, aunque ya este martes varios grupos han salido a las calles.