Carlos III, primogénito de Isabel II y su sucesor en el trono británico, será este sábado proclamado rey en el Consejo de Ascensión, según ha confirmado este viernes el Palacio de Buckingham.
Según ha revelado hoy un comunicado emitido por la casa real británica, "Su Majestad, el rey, será proclamado en el Consejo de Ascensión mañana por la mañana en los (llamados) Apartamentos de Estado del palacio de Saint James, en Londres".
La nota señala que el Consejo de Ascensión, al que asistirán miembros del Consejo Privado, estará dividido en dos partes, y en la segunda el nuevo monarca hará una declaración y su juramento.
"En la primera parte (de las dos en las que se divide), el Consejo Privado -Privy Council-, sin el rey presente, proclamará al soberano y aprobará formalmente varias órdenes resultantes, como las disposiciones para la proclamación", se detalla en la nota.
Se agrega que "la segunda parte es la celebración del rey de su primer Consejo Privado. El rey hará su declaración y leerá y firmará un juramento para mantener la seguridad de la Iglesia en Escocia y aprobar las órdenes en el Consejo, que facilitan la continuidad del Gobierno".
Según el Palacio, a la celebración de ese acto del Consejo de Ascensión le seguirá mañana la llamada Proclamación Principal, que se leerá a las 10.00 GMT desde el balcón que da al patio Friary Court en el palacio de St James.
Esa proclamación será leída, conforme a los planes, por el Rey de Armas de la Jarretera, acompañado por el conde mariscal, Edward Fitzalan-Howard, otros oficiales de Armas y los Sargentos de Armas.
En el comunicado se agrega que "este será la primera lectura pública de la Proclamación". Posteriormente habrá una segunda lectura en el edificio de la antigua Bolsa (Royal Exchange) en la City de Londres (su distrito financiero), a las 11.00 GMT del sábado, y también se hará lo mismo en Escocia, Irlanda del Norte y Gales el próximo domingo.
Las primeras palabras de Carlos III
Apenas media hora después de confirmarse la muerte, la Casa Real trasladó anoche una carta del nuevo rey, donde confirmaba "un momento de gran tristeza para mí y todos los miembros de mi familia".
"Lamentamos profundamente el fallecimiento de una soberana querida y una muy amada madre. Sabemos que su pérdida se sentirá profundamente en todo el país, los reinos y la Commonwealth, y por innumerables personas en todo el mundo", se lee en la citada carta, donde confiesan el confort que sentirán gracias al "amor profundo" que el pueblo sentía por la reina.