La tercera jornada de congregación de cardenales preparatoria del cónclave ha comenzado con polémica. Varios cardenales han exigido conocer el 'informe de Vatileaks' ya que creen que es fundamental saber qué ocurre dentro de la Iglesia para poder elegir al sucesor de Benedicto XVI.
El papa emérito leyó el informe y decidió que sólo el futuro Papa tuviera acceso a esta información.
Esta petición de conocer el 'informe Vatileaks' lo encabezan los cardenales del país con más católicos del mundo, Brasil.
"No recibir el informe completo, pero sí información, tal vez, por parte de los cardenales que llevaron la investigación. Creo que sería interesante para nosotros porque el gobierno de la Iglesia está en manos de los cardenales", ha expresado el Presidente de la Conferencia Episcopal de Brasil, Raymundo Damasceno Assis.
Assis afirma que el contenido del informe influirá en las votaciones, que si este escándalo del Vaticano pudo ser determinante en la renuncia de Benedicto XVI, también lo será en la elección de su sucesor.
Los brasileños son abanderan una corriente a la que se han unido otros cardenales como el sudafricano Napier o el francés Barbarin.
El propio portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, cree que es normal que los cardenales pidan información que les pueda ser útil para elegir al sucesor más apropiado.
"Ciertamente, puede haber miembros del colegio cardenalicio interesados en tener información que les parece útil o pertinente sobre la situación de la Curia", ha afirmado Lombardi.
Por otro lado, en esta nueva congregación se podría conocer la fecha definitiva de el cónclave que elegirá al sucesor de Benedicto XVI. Ya se barajan varios posibilidades.