Un agente de la Policía de San Antonio, en Texas (EEUU), ha sido despedido tras un nuevo episodio de brutalidad policial: el oficial disparó repetidamente a un adolescente de 17 años mientras comía una hamburguesa dentro de un coche en el parking de un restaurante McDonald's.

El agente, James Brennand, que todavía estaba en periodo de prueba en el momento del incidente, acudió al lugar de los hechos a las 10:45 horas del domingo, atendiendo a una llamada por unos disturbios que no estaban relacionados con la víctima.

Fue allí cuando, según apunta la capitana Alyssa Campos, el policía se percató de "la presencia de un vehículo que le había eludido el día anterior cuando intentó detenerlo al observar que la licencia registrada no coincidía con el vehículo real".

El agente pidió refuerzos pero se acercó al coche antes de que llegaran. El momento fue grabado en vídeo por la cámara subjetiva del policía y muestra cómo le abre la puerta y le pide que baje del coche.

Es en ese momento cuando el joven, Erik Cantú, echa marcha atrás, aun con la puerta abierta, y el agente comienza a disparar contra la víctima. El adolescente, que iba a acompañado por otra menor, huyó del lugar mientras el policía seguía disparando. Finalmente fueron localizados a una manzana del McDonald's.

"Si bien el tiroteo del domingo contra un adolescente desarmado por parte de un entonces agente de policía de San Antonio sigue bajo investigación, los hechos y las pruebas que hemos recibido hasta ahora nos llevaron a rechazar los cargos contra Erik Cantú para una mayor investigación", ha señalado el fiscal del condado de Bexar, Joe Gonzales.

El joven, que permanece hospitalizado, se enfrenta a cargos por evasión de la detención y de agresión a un agente de la autoridad ya que, cuando echó marcha atrás, golpeó al policía con la puerta del coche.