La Comisión Europea permitirá a países colindantes con Ucrania y principales críticos con el incremento de sus importaciones de cereal, como es el caso de Polonia y Hungría, activar un mecanismo de emergencia para vetar el grano procedente de este país. Sí podrán recibirlo para exportarlo al resto de la Unión Europea.

Esta es una de las medidas del paquete que el vicepresidente económico, Valdis Dombrovskis, y el comisario de Agricultura, Janusz Wojciechowski, han propuesto a los líderes de Polonia, Hungría, Bulgaria, Rumanía y Eslovaquia en su reunión de este miércoles, en la que han participado también representantes de Ucrania.

Sin embargo, la Comisión ha precisado en una declaración al término del encuentro que esta medida está sujeta a que Polonia y Hungría levanten sus medidas "unilaterales", en referencia al veto que anunciaron a principios de esta semana para los productos agroalimentarios procedentes de Ucrania ante el volumen de importaciones de grano.

"Subrayamos la importancia de seguir rápidamente un planteamiento común de la UE, en lugar de soluciones unilaterales, para evitar prohibiciones múltiples y soluciones que pongan en peligro el mercado interior", han señalado los representantes del Ejecutivo comunitario.

Al término de la reunión se ha acordado proseguir las consultas políticas en los próximos días con vistas a una "solución rápida".

Fuentes comunitarias han explicado que este veto de emergencia puede activarse a través de una cláusula especial de salvaguardia inmediata que permitirá la entrada de importaciones en los cinco países más críticos con el incremento de importaciones de cereal ucraniano únicamente para su tránsito y transporte a otros Estados miembro de la UE o al resto del mundo.

100 millones de euros para agricultores del Este afectados

El paquete propuesto por la Comisión incluye también un segundo tramo de 100 millones de euros de ayuda financiera a los agricultores afectados, medidas excepcionales de salvaguardia para productos clave y medidas para facilitar el tránsito de las exportaciones ucranianas de cereales a través de los corredores solidarios.

La duración de dicha medida se extenderá durante el tiempo que sea necesario para deshacer los bloqueos que han alegado los países vecinos ante la acumulación de grano y no requerirá la aprobación de los Estados miembro, al tratarse de una medida preventiva con carácter de emergencia.

Se trata, según han explicado las mismas fuentes, de un mecanismo a escala de la UE para circunstancias excepcionales y una solución proporcional al problema que permitirá también a la UE estar preparada para cualquier circunstancia de emergencia en el futuro.

En una carta remitida a los líderes de los países colindantes con Ucrania, la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, ya avanzó que Bruselas iba a adoptar medidas preventivas de salvaguardia, incluido en el reglamento sobre medidas comerciales autónomas, ante lo que ha calificado de "consecuencias imprevistas" del "inesperado" aumento de las importaciones de grano ucraniano.

No obstante, advertía en su misiva de que las medidas "unilaterales" sólo pueden "jugar a favor de los adversarios" de Ucrania y no deben "erosionar el apoyo inquebrantable" de la UE.