Un camión cisterna y dos contenedores dispuestos en los carriles cortando el puente fronterizo de Tienditas, que comunica Cúcuta, en Colombia, con Táchira, Venezuela. La oposición venezolana denuncia que han sido colocados por el ejército para bloquear la inminente entrada al país de la ayuda humanitaria.

A ellos, a los militares, ha apelado de forma directa Juan Guaidó. "Permitan que entren para atender a sus familias", ha dicho el presidente encargado de Venezuela.

Maduro se ha opuesto desde un inicio a esta ayuda. Cree que detrás del ofrecimiento se esconde una intervención militar liderada por EEUU. "El imperialismo no ayuda a nadie; lo que han llevado siempre es bombas", ha señalado.

Los suyos suben incluso el tono. "Si hay que coger el fusil, se coge", afirma el hermano de Chávez. "Señor Guaidó, usted no ha escuchado el silbido de una bala cerca", ha señalado Diosdado Cabello, Presidente de la Asamblea Nacional Constituyente.

Y en este escenario revuelto, el gobierno de Maduro inicia los trámites para convocar elecciones, pero a la Asamblea Nacional que controla Guaidó, de momento no las presidenciales.