La isla de Lesbos: destino de vacaciones. Famosa por su comida deliciosa, sus playas y... Moria, el mayor campo de refugiados de Europa.

Porque en esta paradisíaca isla griega malviven atrapadas miles de personas, entre ellas casi 5.000 menores, niños que juegan entre el barro, en vez de ir al colegio.

Moira representa la ineficaz respuesta de la Unión Europea a la migración. "No podemos tener en Europa personas viviendo en condiciones miserables", ha señalado Filippo Grandi, alto comisionado de Naciones Unidas para los refugiados.

Desde 2018, la cantidad de personas que viven en este campo ha aumentado notablemente, desbordándolo. Concebido en 2015 para 3.000 personas, hoy sobreviven en él más de 15.000 refugiados.

Un hecho que causa, por ejemplo, que 90 personas tengan que compartir un retrete portátil.

El Gobierno griego quiere cerrar estos campos, pero su solución es sustituirlos por centros de internamiento donde los solicitantes de asilo no tendrían libertad ni para entrar ni para salir.

Desde enero han llegado al país heleno 65.829 personas, más que a España, Italia, Malta y Chipre juntos, lo que ha vuelto a convertir a Grecia en la puerta principal de entradas irregulares de Europa.