El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha asegurado esta madrugada que las fuerzas estadounidenses defenderían la isla de Taiwán en el caso de que produjera una invasión china, en su declaración más explícita hasta la fecha sobre el asunto.

Cuestionado al respecto en una entrevista en la cadena CBS, sobre si las tropas de EEUU defenderían la isla gobernada democráticamente que China reclama, ha respondido que "sí, si se produce un ataque sin precedentes".

Los Estados Unidos han seguido durante décadas una política de "ambigüedad estratégica" con respecto a la isla y, tradicionalmente, no han dejado clara su posición al respecto de una respuesta militar a un ataque a Taiwán.

Desde la Casa Blanca señalan que esto no implica un cambio de postura estadounidense. "El presidente ha dicho esto con anterioridad, incluido en Tokio a principios de año. También ha dejado claro que nuestra política con respecto a Taiwán no ha cambiado", ha aseverado un portavoz en declaraciones a Reuters.

Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Taiwán ha agradecido a Biden el "sólido compromiso" estadounidense al tiempo que mejorarán sus "capacidades de autodefensa".

Pekín acusa a Biden de poner en riesgo "la paz y la estabilidad"

El Gobierno de China ha recriminado a Biden, su aviso sobre una posible intervención norteamericana, ya que Pekín considera que pueden dañar "aún más" las relaciones" bilaterales y complicar "la paz y la estabilidad" en la región.

La portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Mao Ning, ha emplazado a Biden a "entender" que, para Pekín, Taiwán es un tema "de una naturaleza muy sensible", según la agencia de noticias Bloomberg. Le ha instado a ceñirse al "principio de una sola China", respetado teóricamente en Washington.