"Querida madre, hoy he tomado el relevo del trono y te estoy agradecido, inmensamente agradecido por todos estos años", señaló con lágrimas en los ojos Guillermo-Alejandro, que dijo a sus conciudadanos que "en nombre también de la reina (en referencia a Beatriz), les agradezco a ustedes todo el apoyo y la confianza".

A continuación Beatriz y Máxima, entre gritos de la multitud de "viva Holanda", se agarraron de las manos, mostrando la unión entre ambas. La princesa Beatriz, que para la ocasión optó por un traje de chaqueta de tonos berenjena, se retiró al interior del palacio, para dar paso a que los nuevos reyes, junto a sus tres hijas: Catalina-Amalia, de nueve años y la heredera del trono, Alexia, de siete y Ariane, de seis, saludaran a los holandeses, al tiempo que sonaba el himno nacional.

La reina Máxima vestía para esta ceremonia un vestido en tonos "nude" con cuerpo de escote drapeado, falda plateada y mangas abullonadas y llevaba el pelo recogido en un moño bajo, mientras que las tres niñas iban con idénticos trajes de color amarillo sin mangas y el pelo adornado con una diadema de flores en el mismo tono.

La ceremonia de abdicación de Beatriz de Holanda, que anunció esa decisión a fines de enero poco antes de cumplir 75 años, tuvo lugar minutos antes en el salón de Moisés del palacio real de Amsterdam. "Hoy dejo sitio a una nueva generación. Mi hijo asume hoy la responsabilidad de esta nueva función", dijo la ya princesa de los Países Bajos con tratamiento de alteza real, en un breve discurso.

Beatriz puso fin a un reinado de 33 años tras firmar el acta de abdicación, al igual que hicieron Guillermo-Alejandro y Máxima, y otras altas personalidades del Estado neerlandés, como el primer ministro de Holanda, el liberal Mark Rutte.

También estuvieron presentes los presidentes del Senado y el Congreso de los Estados Generales de los Países bajos, al igual que los ministros, el vicepresidente del Consejo de Estado del Reino, diputaciones de Aruba, Curaçao y Sint Maarten y los demás miembros de la familia real.