Mickaël H. sufrió alucinaciones la noche anterior de matar a puñaladas a cuatro compañeros de la Prefectura de París. Es lo que ha declarado su mujer tras ser interrogada.

Según fuentes de la investigación citadas por 'France Info', la mujer, que fue arrestada tras la masacre, contó que Mickaël H., abatido durante el ataque, había tenido visiones y había escuchado voces esa noche, y se despertó sobresaltado.

Las fuerzas del orden registraron el domicilio de este funcionario en la localidad de Gonesse, al norte de la capital francesa, donde requisaron material informático y teléfonos.

El asesino, que tenía 45 años y trabajaba desde 2003 como informático en la Prefectura de Policía de París, era sordo y con problemas de habla, y se había convertido al Islam hace menos de un año.

El ministro del Interior, Christophe Castaner, dijo después del ataque que nunca había tenido problemas de comportamiento ni había dado señales de alerta.

"No tenemos indicaciones sobre una eventual radicalización", ha dicho la portavoz del Gobierno, Sibeth Ndiaye, a la emisora 'France Info' y añadió que el Ministerio Público no considera que se trate de hechos terroristas.

No obstante, el fiscal de París, Rémi Heitz, precisó que está en contacto con la Fiscalía Nacional Antiterrorista por si hubiera elementos sobre las motivaciones del autor de la masacre que condujeran a cambiar de calificación de los hechos.