Si ha habido un par de versos sueltos en esta cumbre de la OTAN han sido Finnegan y Maisy, las nietas del presidente estadounidense, Joe Biden.
La menor de ellas, Maisy, estudiante de Bellas Artes, ha retransmitido parte de su visita a Madrid a través de TikTok y se ha mostrado de lo más natural: plantándose en sudadera ante la reina Letizia y paseando por la Milla de Oro de la capital española como si no estuviera rodeada por decenas de guardaespaldas.
Su hermana mayor, Finnegan, muy interesada en los Derechos Humanos y el feminismo, no ha perdido detalle de lo que se hablaba en el centro para refugiados ucranianos que ambas visitaron este martes y las dos jóvenes se han abrazado con los chefs que las han agasajado durante su visita.
Las dos veinteañeras conocen de primera mano lo que es la presión mediática; son hijas de Hunter Biden, el vástago más díscolo del mandatario demócrata y autor de los escándalos más sonados del clan. Aunque no son nietas biológicas de Jill Biden es como si lo fueran, porque ella siempre ha estado en sus vidas. Con ella se toman algún vino y trasnochan de vez en cuando, según cuenta la propia primera dama.