Atracción turística

Así es el Elevador de Glória, el funicular de Lisboa que usan 3 millones de personas al año

Inaugurado en 1885, cuenta con vagones de 1920. Se trata de una de las atracciones turísticas más populares de Lisboa, aunque sigue siendo una gran ayuda para subir las empinadas cuestas de la ciudad.

El elevador de Glória, el funicular de Lisboa, retratado en octubre de 2019El elevador de Glória, el funicular de Lisboa, retratado en octubre de 2019Andrew Aitchison / In pictures via Getty Images

Más de 30 millones de personas visitaron Portugal en un año récord que puso en jaque a todo el país. Y Lisboa, su capital, lo ha notado especialmente: el número de pisos turísticos el año pasado rondaba los 20.000, con barrios donde más de la mitad de los alojamientos tienen fin turístico y no de primera vivienda. Y es que desde hace unos años, Lisboa se puso de moda entre los viajeros y eso se nota.

Uno de los grandes reclamos de Lisboa —además de la gastronomía portuguesa, en general— son los tranvías, que lucen en postales y fotografías de la capital. Decenas de turistas hacen cola en las diferentes paradas para subirse a alguno de estos vehículos, clásicos, vintage, perfectos para fardar en las redes sociales. Y entre los que más visitantes recibes está el Elevador da Glória, el funicular que une la plaza de Restauradores con el Bairro Alto y uno de los miradores más famosos de la capital, el de São Pedro de Alcântara.

Este es, precisamente, el funicular que este 3 de septiembre de 2025 sufrió un grave accidente que ha dejado 17 muertos y más de dos decenas de heridos, entre ellos dos turistas españoles, que fueron dados de alta poco después del siniestro. El Elevador da Glória fue inaugurado en 1885 y sigue funcionando, aunque con fines turísticos, para ayudar a subir las empinadas cuestas de la capital. El de Glória es uno, pero además de este están el de Bica o el de Lavra, con las mismas funciones.

Fue concebido por el ingeniero portugués Raoul Mesnier du Ponsard y originalmente funcionaba por contrapeso de agua. Más tarde pasó a tener un sistema de locomoción a vapor y en 1914 fue pionero en moverse por tracción eléctrica. Tiene capacidad para 42 personas en cada cabina: 22 sentadas y 20 de pie. Este, en concreto, realiza un recorrido de 275 metros en 2 minutos, a lo largo de la empinada Calzada de Gloria, que tiene una inclinación del 18%.

Esta línea es la segunda de funicular más antigua de Lisboa, aunque sus vagones son mucho más modernos: datan de 1920. Esto es lo que le da, en parte, su encanto: no es un vagón moderno, es un vagón digno de los años veinte que, sin embargo, sigue funcionando con normalidad y transporta a unos 3 millones de personas cada año.

El precio por subirse al Elevador da Glória ronda los 4 euros si lo compras con ida y vuelta (la vuelta puede ser en otro ascensor o incluso otro día) y los 3 euros por trayecto único. Aunque tarda poco en recorrer la cuesta, pasan más de 10 minutos entre trayecto y trayecto, por lo que las colas pueden ir creciendo a mayor velocidad a la que los vagones trasladan a la gente.