Si nos fijamos en la zona en la que impactó el misil lanzado por Estados Unidos este viernes en Afganistán, podemos ver que no hay casas destruidas, como muestra el vídeo. Esto se debe al nuevo arma utilizada por los estadounidenses, conocida como la 'bomba ninja'.

Se trata del misil Hellfire R9X, que sustituye los explosivos por seis cuchillas dentro del cuerpo del misil. Antes de impactar, el misil despliega las cuchillas, de un metro de largo cada una. Su gran velocidad de impacto les permite atravesar vehículos y edificios y matar al objetivo. El fin de este diseño es no causar explosiones que puedan dañar a civiles y provocar daños colaterales.

El Pentágono ha anunciado que su ataque en represalia por el atentado de Kabul del jueves habría matado a dos supuestos miembros "de alto rango" de la rama local del ISIS y habría herido a un tercero. Una vez finalizadas las labores de evacuación, países como Francia ya piden un corredor humanitario para los que se han quedado atrás.

Alemania admite que su misión de rescate ha acabado con más de la mitad del personal local abandonado y desde Reino Unido, Boris Johnson ha pedido que los talibanes "tendrán que garantizar un paso seguro para aquellos que desean salir del país" si quieren gozar de reconocimiento diplomático.