Una madre fue apuñalada por un grupo de jóvenes después de pedirles que "se callaran" para que no despertasen a su bebé. La herida se produjo muy cerca del corazón, le afectó al esternón y tuvo que ser trasladada de inmediato al hospital para ser operada.
El novio de la víctima ha declarado que todo ocurrió muy rápido y que "ninguno de los dos se dio cuenta de que había sido apuñalada, hasta que vimos la sangre en su pecho". Tras el ataque, el grupo de jóvenes huyo corriendo. Uno de ellos, de 19 años, fue arrestado pero ya ha sido puesto en libertad sin cargos.
"Siempre hay jóvenes haciendo ruido en la calle y mi mujer sólo quería que parasen", añade la pareja de la víctima. La mujer describió a su agresor como una mujer blanca de unos 18 años, con el pelo largo, castaño y con chándal. La investigación continúa en curso para esclarecer las circunstancias del accidente.