El terrorista Amedy Coulibaly adquirió, días antes de los atentados, cuatro pistolas Tokarev, un revólver, cartuchos de dinamita y granadas de gas lacrimógeno. Todo estaba en piso franco al sur de París. Fue ahí donde los detectives de la Brigada Criminal de París encuentran la pista que les lleva al cómplice del terrorista.