Las autoridades sanitarias alemanas evalúan la posibilidad de imponer test rápidos en los aeropuertos a los viajeros que regresen de las denominadas "regiones de riesgo" afectados por la pandemia del coronavirus.

Se trata de un debate abordado por los ministros de Salud del gobierno central,Jens Spahn, y los poderes regionales estatales alemanes, aunque aún no se ha tomado una decisión formal al respecto. Se espera que el viernes los ministros vuelvan a hablar sobre los detalles de la medida, incluyendo quién pagará los test en cuestión.

La titular de Sanidad del "Land" de Baviera, Melanie Hulm, aseguró este miércoles a la televisión pública ZDF que aún no se ha adoptado aún una decisión vinculante al respecto, sino que de momento se plantea la opción de emitir una "recomendación" al respecto.

Las personas que ingresen en Alemania desde los países considerados de riesgo bajo, como Francia, España, Grecia y la mayoría de los europeos, no tendrían que estar sujetos a esta nueva medida. Entre las regiones de riesgo actualmente calificadas como tales dentro de Europa por el Instituto Roberto Koch (RKI), competente en la materia en el país, se encuentran Luxemburgo y algunos países de los Balcanes, así como Turquía.

Cuarentena obligatoria

Actualmente, a los viajeros que regresan de estas zonas se les impone la obligatoriedad de quedar en cuarentena domiciliaria durante catorce días. Esta opción, sin embargo, se considera poco efectiva, especialmente en épocas de alto flujo de viajeros como las vacaciones estivales, ya que a la práctica no se lleva a cabo un seguimiento real de su cumplimiento.

Varios aeropuertos internacionales del país, como los de Fráncfort, Múnich y Colonia/Bonn ofrecen ya la posibilidad al viajero de realizar estos test rápidos, a modo de alternativa a la cuarentena. Su coste -unos 90 euros- es asumido por el propio viajero, a cuyo teléfono móvil se transmiten los resultados unas horas después.

Los aeropuertos alemanes se mantienen cautos ante la aprobación de la nueva norma y han asegurado que su personal no puede realizar las pruebas. "Si las autoridades sanitarias ordenan (la realización de) un test rápido, tendrían que llevarlos a cabo ellos", ha indicado la Asociación Alemana de Aeropuertos en un comunicado. "También debe determinarse cómo tratar a los pasajeros que den positivo", han agregado.

Mientras que esta medida que será valorada el viernes no afectaría a los viajeros españoles, en Francia ese mismo día el Gobierno estudiará ella posibilidad de cerrar fronteras para protegerse de la propagación del coronavirus, aunque en ningún momento el Ejecutivo galo ha aclarado si la medida podría afectar a España y se han limitado a decir que no descartan nada.