El G7 se ha reunido tras los nuevos ataques de Rusia sobre Kiev, avanzando nuevas sanciones contra Putin por su invasión y censurando los "crímenes de guerra" cometidos en sus "ataques indiscriminados sobre población civil".

Los líderes del G7 han trasladado su intención para alcanzar acuerdos de seguridad para ayudar a Ucrania a defenderse por sí misma frente a Rusia. "Seguimos dispuestos a alcanzar acuerdos conjuntos con los países interesados e instituciones en acuerdos de seguridad continuada para ayudar a Ucrania a defenderse por sí misma, asegurar su libertad y democracia en el futuro y detener una futura agresión rusa", afirman.

Además, piden a Bielorrusia que deje de "permitir" la invasión de Rusia sobre Ucrania, condenando el lanzamiento de misiles sobre Kiev "de la forma más fuerte posible". Sobre los referéndums celebrados en las regiones prorrusas de Ucrania, insisten en que no reconocen los resultados de los mismos.

El miedo más presente en la fase actual del conflicto pasa por esa amenaza nuclear de Putin, que ya tiene respuesta por parte del G7. "El uso irreponsable de retórica nuclear está poniendo la paz y seguridad global en riesgo", advierten.

Además, añaden que cualquier uso de armas "químicas, biológicas o nucleares" tendrá "severas consecuencias" para Rusia por parte de los países aliados.