Los abuelos italianos que ejerzan de canguros de sus nietos también podrían beneficiarse del denominado "bono baby-sitter" que el Gobierno del país transalpino creó tras cerrar sus colegios en marzo por la pandemia de coronavirus.
Como consecuencia del cierre de las escuelas, que no reabrirán hasta septiembre, el Ejecutivo de Roma estableció un permiso parental para los padres de niños de hasta 12 años y, como alternativa al mismo, también la posibilidad de recibir un bono por la compra de servicios de guardería, de hasta 1.200 euros por familia.
Este bono también puede cobrarse cuando sean familiares -abuelos, tíos u otros- quienes se ocupen del cuidado de los niños mientras los padres trabajan, siempre y cuando no convivan con ellos. Así se infiere de una circular del INPS (el Istituto nazionale della previdenza sociale, la Seguridad Social italiana) del pasado 17 de junio, en la que se indica que "en caso de convivencia los miembros de la familia están excluidos de la lista de sujetos admitidos para realizar trabajo como niñera remunerada a través del bono en cuestión".
En caso de convivencia los familiares están excluidos de la lista de sujetos admitidos para realizar trabajo como niñera remunerada a través del bono"
En este sentido, dicha comunicación asimismo especifica que, además de los miembros de la familia que conviven con el solicitante, a efectos de esta ayuda tampoco pueden contar como canguros con remuneración los padres de los menores, incluso cuando no convivan con ellos.
Por otra parte, el pasado mes de mayo el Gobierno italiano asimismo introdujo una alternativa a esta bonificación por la compra de servicios de cuidado de niños: un bono para campamentos de verano y servicios complementarios para la infancia, vigente desde el cierre de escuelas hasta el 31 de julio.
La cuantía máxima de estas prestaciones es de 1.200 euros por hogar, "que se utilizarán para apoyar el rendimiento y la vigilancia de los niños en el período de cierre de los servicios educativos escolares", según el INPS. Si se tienen varios niños menores de 12 años, el bono se puede solicitar para todos ellos, pero el total de la ayuda no superará los 1.200 euros.
Según indica el Istituto, el mencionado límite de edad no se aplica en el caso de los niños con discapacidad, y de la ayuda también pueden beneficiarse padres adoptivos o de acogida.