Hasta 29 provincias están en aviso este sábado por nieve, viento, olas y lluvia. La causante, una borrasca atlántica que nos mantiene con el paraguas bien abierto desde este viernes. Este sábado le toca al este y el norte, donde parece invierno.
En Cantabria, están en alerta amarilla por lluvia y naranja por fuerte oleaje. Allí las olas han llegado a alcanzar los tres metros de altura, aunque está previsto que lleguen hasta los cinco metros. En cuanto a las temperaturas, las máximas han llegado a los 13 grados, por lo que el ambiente es invernal.
Mientras, en Sevilla, donde este sábado se celebra la final de la Copa del Rey, miran al cielo. Este viernes fue el día más lluvioso de este año hidrológico en la capital andaluza, una lluvia que era más que necesaria en la cuenca del Guadalquivir, que todavía tiene graves problemas de sequía.
La borrasca atlántica causante de estas precipitaciones también se ha dejado notar en Alcoy, donde el viento y la lluvia han complicado un poco la festividad de Moros y Cristianos.
En Barcelona, han pasado del sol al granizo en solo 20 minutos, una lluvia que ha escondido las calles de Badalona tras ríos de barro.
Albacete, por su parte, ha amanecido este sábado teñida de blanco. Y en la estación de San Isidro apenas se podía ver nada por una tremenda nevada que ha caído esta mañana, la misma que en Soria dejaba hasta 20 centímetros de espesor en solo 12 horas. La nieve ha dejado una preciosa estampa de árboles vestidos de blanco más propia de un invernal mes de enero que de un abril primaveral.