Muchas grandes empresas ya lo hacen. Si sale adelante la reforma del Gobierno, serán las pequeñas y medianas las que deban ponerlo en marcha. Así fichar en el trabajo será obligatorio tanto a la entrada como a la salida.

María tiene a 20 personas a su cargo y critica que la medida se establezca por imposición. "Me parece radical que sea obligatorio. Las empresas deberían tener libertad para actuar", afirma María Sichiing, responsable de un Call Center.

Sin embargo el objetivo, según el Gobierno, es proteger al trabajador, que recibirá mensualmente un informe de sus horas ordinarias y extraordinarias trabajadas. Informe que también recibirán los representantes sindicales.

La empresa deberá guardar esta información durante cuatro años. "Es algo fundamental para poder controlar la contratación a tiempo parcial", afirma Unai Sordo, secretario general de CCOO.

Por su parte, los trabajadores creen que saldrán beneficiados. Colectivos como repartidores o comerciales, por su dificultad para registrar su jornada, estarán exentos.

En el resto de casos si el empresario incumple la norma, podría ser sancionado por cada trabajador afectado.