Después de años de incrementos de compra de vivienda, parece que podemos confirmar que hemos alcanzado el techo. Desde los 30.000 traspasos mensuales que se firmaban en el momento más deprimido de la Gran Recesión, llevamos meses instalados en la cifra de 50.000. Las causas son múltiples, porque los tipos de interés suben y los precios no bajan, pero la falta de stock de vivienda también está jugando su papel.
En diciembre de 2022 se atisbó la primera caída de compras en 12 meses y, pese al repunte de enero, parece que febrero ha confirmado el frenazo. Los datos del Instituto Nacional de Estadística confirman la cifra de 50.186 viviendas, una caída de un 6,6% con respecto a hace un año, y del 11,1% si lo comparamos con el mes anterior, enero. Tras el fin de la pandemia, el margen de firmas se ha movido desde las 45.000, hasta rozar casi las 60.000.
El enfriamiento no llega a los precios
Que el mercado toque techo puede frenar también los precios, pero ni mucho menos está haciendo que bajen, y tampoco parece que esto vaya a pasar a corto o medio plazo. La evolución que muestran los datos oficiales es que las subidas no dieron tregua el año pasado, y los índices con datos más recientes, de marzo, como el de Idealista, siguen contabilizando subidas, tanto mensuales como interanuales. El precio del metro cuadrado en España lo cifran en 1.943 euros, que es un 7,3% más que el año anterior.
La causa principal que indican las inmobiliarias es la falta de vivienda. Nora García, vicepresidenta de la Federación de Asociaciones Inmobiliarias de España, avisa: "Si no hay una reposición, la bajada de las ventas va a ser obligada porque no va a haber vivienda para vender".
Los tipos de interés sí amenazan a los hipotecados en variable
Después de la tormenta bancaria que empezó en Estados Unidos y golpeó en Europa dando la puntilla al gigante suizo Credit Suisse, los tipos de interés vuelven a subir con fuerza. El euríbor, ya alcanzó el 3,647% en marzo, y todo indica que en abril la media subirá más de una décima. Prácticamente a cualquier hipotecado en variable al que le toque revisar pronto empezará a pagar unos intereses del 4%.
Precisamente en esta cuestión, el Banco de España ha lanzado una alerta sobre el incremento del estrés hipotecario. Con los intereses instalados en esta cifra, las familias con carga financiera elevada, que dediquen al menos el 40% de sus ingresos a la cuota hipotecaria van a aumentar considerablemente. Hoy se cifran en el 10% del total de hipotecados, y la subida que han calculado es de 3,5 puntos porcentuales más, e incluso rozando el 15% si los tipos llegan al 5%.