Estamos a las puertas de que se dé por cerrada la campaña anual del Ministerio de Hacienda para presentar la declaración de la Renta, correspondiente al ejercicio 2019-2020. Será el próximo martes 30 de junio la fecha límite para presentar la declaración.

El pasado jueves, 25 de junio, fue el último día para presentar esta declaración con resultado a ingresar mediante domiciliación bancaria. De cara a la próxima semana, el lunes 29 de junio será el último día para solicitar cita previa para ser atendido por vía telefónica o en las oficinas de la Agencia Tributaria.

Los contribuyentes tienen la opción de fraccionar el importe de la deuda tributaria que resulte su declaración, sin que esta división repercuta gastos extra. El primero de esos pagos será del 60% del importe de la deuda, mientras que el segundo será el 40% restante, una cantidad que podrá abonarse hasta el 5 de noviembre de este año.

Finalmente, se decidió no prolongar la campaña de declaración de la Renta, una opción que se barajó en plena crisis del coronavirus. Tampoco se retrasó el inicio de la misma, dando comienzo el 1 de abril. Lo que sí experimentó un retraso fue la atención en oficinas, cuyo inicio estaba previsto para el 13 de mayo y se tuvo que aplazar hasta el 8 de junio.

La declaración de la renta también se puede presentar más tarde de ese 30 de junio, pero los ciudadanos que así lo hagan se exponen a sanciones de entre el 5 y el 20% del resultado de la misma.

Si por algún motivo alguien no puede presentar su declaración, se enfrentará a varias multas que podrán ir desde un 50% de recargo hasta un 150%, dependiendo de si se considera la infracción leve (igual o inferior a 3.000 euros), grave (superior a 3.000 con ocultación) o muy grave (utilización de medios fraudulentos).