Ganar mucho dinero casi siempre es sinónimo de pagar más impuestos, pero hay hasta 189.000 personas que incumplen esta máxima: el 1% más rico de la población paga proporcionalmente menos impuestos que el 20% más pobre. Es una de las conclusiones de un informe elaborado por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada Fedea. Pero, ¿cómo es esto posible?

Parece increíble pero tiene una explicación y el primer motivo lo encontramos en los impuestos indirectos, entre los que están el IVA o los impuestos eléctricos: da igual cuál sea nuestra renta, todos pagamos lo mismo al ir al súper o echar gasolina. Así lo apunta el abogado fiscal José Mateo Ruescas que asegura que "son injustos porque pagan igual ricos que pobres".

Además, ese 1% más rico tiene rentas de capital, es decir, inversiones en fondos o alquileres y ese tipo de rentas "gravan a la mitad que las rentas de trabajo o las pensiones", según apunta Jorge Onrubia, uno de los investigadores que ha elaborado el citado informe.

A todo esto hay que añadir las argucias de algunos que guardan su patrimonio en sociedades o en fondos que no rescatan anualmente y por tanto no tienen que pagar por ellos, como desvela el inspector de Hacienda José María Peláez.