El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha anunciado la convocatoria de movilizaciones "de manera inminente", antes de que acabe el mes de septiembre, si la CEOE no cambia de postura ante la negociación de los convenios colectivos, que actualmente se encuentran en una "situación de atasco".

Palabras de Álvarez en una entrevista en Cadena Ser, en la que ha detallado que esos convenios "no se acuerdan, no se firman", y por ello "si la CEOE no cambia nos va a llevar a un proceso de movilizaciones como está ocurriendo en otros países europeos".

Algunas de esas movilizaciones se desarrollarán en los ámbitos territoriales y otras a nivel estatal, depende de los sectores, ha explicado el secretario general de UGT, quien ha dejado claro que su sindicato y CCOO ya llevan tiempo trabajando en ellas y se van a poner en marcha antes de que acabe septiembre.

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ya dijo ayer en el Congreso que mostraba su "apoyo explícito a las movilizaciones sindicales contra la patronal", a la vez que reivindicóelevar el SMI por encima del 60% del salario mediodebido a la situación de "máxima incertidumbre" de la economía.

Preguntado por la última vez que habló con el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha dicho que fue a finales de junio, pero ha querido insistir en que ese no es el problema, sino que "la patronal debe ser consciente de que hace falta ese acuerdo en estos momentos".

La única manera de desatascar esta situación, a su juicio, es con un pacto de salarios, ya que el pacto de rentas del que tanto se ha hablado "se ha ido construyendo con las medidas que ha ido tomando el Gobierno", aunque hay algunas que se deben retomar.

Una de ellas es la creación de un fondo de rescate de las hipotecas, ya que el euríborestá creciendo y es razonable que el estado pueda ayudar con créditos o subvenciones a las familias que no pueden hacer frente al pago de las hipotecas, con el objetivo de que no comience "otra crisis hipotecaria".

Por otra parte, ha reiterado que subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 1.049 euros es "quedarse muy corto" y ha apostado por redondearlo a 1.100, ya que el IPC está "desbocado" y las personas que menos tienen no pueden seguir perdiendo poder adquisitivo.

Al respecto, en ya señaló en Al Rojo Vivo que "el Gobierno tiene que ser consciente de las previsiones que hicieron los expertos son cortas en relación a la nueva realidad que estamos viviendo". Por este motivo, solicita una modificación. "Pediremos que la comisión de expertos se reúna y actualice las previsiones en la perspectiva que nosotros creemos que debería subir el salario mínimo, que sería en 1.100 euros. Esto supone una subida del 10%, que parece que es razonable para la gente que menos tiene. Estamos pensando en las familias que tienen muchas dificultades para llegar a fin de mes y con la inflación todavía más".

La CEOE: "Subirlos con la inflación no es bueno para nadie"

El vicepresidente de la federación de autónomos ATA y vicepresidente de la CEOE, Lorenzo Amor, ha asegurado en Al Rojo Vivo que los empresarios están dispuestos a "buscar subidas salariales para que los trabajadores no pierdan poder adquisitivo", pero que vincularlos a la inflación es bueno para nadie.

"Si lo que se plantea en estos momentos es indexar los salarios a la inflación, en eso hemos dicho que no. No es bueno ni para los ciudadanos, ni para los trabajadores, ni para las empresas, ni para los autónomos", ha subrayado en una entrevista en Al Rojo Vivo. "Si generamos inflación de segunda ronda, apaga y vámonos", ha dicho.