La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) augura una notable recuperación en la economía española y mundial. En este sentido, la previsión de la entidad ha incrementado en siete décimas el crecimiento del producto interior bruto (PIB) de España para 2021, hasta situarse en el 5,7%.
Así lo ha indicado en la actualización de marzo de su informe 'Perspectiva Económica', publicado este martes. Asimismo, la organización también indica que la mejora de la economía española en 2022 será todavía mayor, de otras ocho décimas. Es decir, creceríamos por encima de otros países como Italia, Alemania o la Eurozona.
De hecho, la mejora en las perspectivas de España es la más elevada en comparación con los países de su entorno. Para el conjunto de la zona euro, la OCDE ha situado en el 3,9% el crecimiento para 2021, tres décimas más que su previsión anterior, mientras que la estimación para 2022 se ha situado en el 3,8%, cinco décimas más.
Las vacunas ayudan al crecimiento mundial
Según la OCDE, la gran prioridad sanitaria y económica debe ser acelerar la vacunación de la población adulta tanto como sea posible. Un hecho que implica "una mayor cooperación internacional" para que las vacunas lleguen también a los países con menos recursos y evitar que el virus siga circulando.
Este llamamiento se ha extendido a España, donde la jefe de la OCDE, la economista Laurence Boone, también ha pedido una aceleración de las inyecciones. "Necesitamos más vacunaciones para poder llevar a cabo una reapertura más rápida y más aún cuando en España la importancia que tiene el turismo en la economía es muy elevada", ha señalado este martes.
El organismo, presidido por Ángel Gurría, también ha elevado en ocho décimas sus pronósticos para la economía española en 2022, de forma que ahora esperan que crezca un 4,8%.
Los crecimientos para este año y el que viene llegan después de que durante 2020 España registrara una caída del PIB del 11%. Esta cifra es mayor que todas las economías del G20. Por detrás se situaron Argentina, con una caída del 10,5%, y Reino Unido, con el 9,9%.