El año 2020 puede traer consigo una nueva factura de la luz. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha remitido al Consejo de Estado una propuesta en la que pide aplicar nuevas tarifas con seis periodos diferentes, al tiempo que establece nuevos periodos horarios de facturación en función de la hora y el día de la semana.

La única pega es que, con esta modificación que está pendiente de aprobación, aquellos clientes que tengan contratada la tarifa regulada tendrían que estar pendientes del reloj, ya que se establecen tramos en diferentes horarios: el barato, el intermedio, un 20% más caro que el anterior; y el caro, un 50% más costoso que el barato. Así se distribuyen los nuevos tramos:

- El barato va desde las 12 de la noche a las 8 de la mañana.

- El intermedio, de 8 de la mañana a 10, y de 2 de la tarde a 6.

- El caro, de 10 de la mañana a 2 de la tarde, y de 6 de la tarde a 8 de la noche.

Una solución para aprovechar la franja horaria en la que el consumo de luz es más barato es programar los electrodomésticos, pero para aquellos que no pueden, existen otras opciones.

Ejemplo práctico: poner una lavadora el fin de semana es una opción que nos costaría la mitad que de lunes a viernes a las 10 de la mañana. Ponerla por la noche, en el tramo de 12 de la noche a 8 de la mañana, también te puede hacer ahorrar con respecto a los tramos más caros del día.

Otra práctica de ahorro consistirá en accionar el lavavajillas justo después de desayunar o de comer, donde entran en funcionamiento el tramo barato y el intermedio, respectivamente. Si lo pones después de cenar, recuerda hacerlo siempre después de las 10 de la noche.

Lo mismo ocurre con la cocina. Para ahorrar con la vitrocerámica en marcha, ten en cuenta que hacer la comida a partir de las 2 de la tarde es la opción más barata; y si tienes que comer de tupper, cocinarlo a partir de las 10 de la noche o antes de salir de casa temprano, hasta las 8 de la mañana.

Si tienes un calentador eléctrico, siempre puedes ducharte justo antes de irte a acostar, o nada más levantarte. Nada de hacerlo de 6 de la tarde a 10 de la noche, que es cuando sale más caro.

Con estos hábitos, en el que el precio varía hasta en un 50% en función de tus horarios, puedes ahorrar -y mucho- en el nuevo recibo de la luz si esta propuesta finalmente sale adelante.