El presidente del grupo nipón Nissan Motor, Makoto Uchida, ha confirmado este jueves la intención del grupo de cerrar su planta de Barcelona, una decisión que ha calificado como "muy difícil" y que, según ha dicho, se ha adoptado tras analizar varias opciones.

Uchida ha confirmado esta decisión, que afectará a unas 25.000 familias y que deja en el aire 3.000 empleos directos, durante una videoconferencia de prensa desde la sede de Nissan en Yokohama, al sur de Tokio, en la que ha dado a conocer los resultados del año fiscal, cerrado en marzo, que terminó con números rojos por primera vez en 11 años.

En una breve mención a las instalaciones en Barcelona al anunciar el replanteamiento en diversas zonas, el CEO de Nissan ha dicho que para esa planta se habían estudiado "varias medidas", pero que la firma finalmente ha decidido cerrarla, aunque no ha precisado cuándo será. "Es una decisión muy difícil, pero tenemos intención de cerrarla y comenzaremos las discusiones para aplicar esta medida", ha afirmado.

El cierre de esta planta, que venían anticipando desde hace varios días medios nipones, ya ha sido comunicado por Nissan a las autoridades españolas. Según las versiones de la prensa de Japon, la producción de la planta de Barcelona será asumida por Renault. Por el momento no se tienen detalles sobre cuándo se aplicará el cierre y qué pasará con los cerca de 3.000 empleados de las instalaciones de Nissan en Barcelona.

En otra mención a su estrategia en Europa, Nissan ha indicado que mantendrá abierta la planta en Sunderland (Reino Unido), aunque mejorando su eficacia. En el año fiscal cerrado el 31 de marzo, la firma tuvo una pérdida neta de 671.200 millones de yenes, unos 5.662 millones de euros, según ha informado este jueves.