La actualización del Indice Fiscal de Calles el pasado mes de diciembre ha provocado esta bajada sustancial en las cuotas pagadas por las tasas de terrazas, reducción que ha beneficiado especialmente a aquellos locales situados en calles cuya situación económica real ha empeorado y, por tanto, tienen una oportunidad de negocio más limitada. Esto se traduce en que la tasa, sin haber sido modificada, consigue ser más progresiva y adaptada a la realidad de la ciudad.

Las bajadas alcanzan un 78% en el caso de Arganzuela, un 48% en Centro o un 28% en Fuencarral. Desde 2009 las categorías fiscales de las calles no se actualizaban: desde entonces el valor de la mayoría de los inmuebles ha disminuido notablemente, por lo que el valor fiscal de las calles se había distanciado de su valor real teniendo como consecuencia que se pagara más por la tasa de terrazas, también por otros tributos, de lo que correspondería.

La actualización del índice fiscal de calles en 2017 corrigió esta situación adaptando la categoría fiscal de las calles a su valor inmobiliario real. Como la mayoría de inmuebles han perdido valor durante estos siete años, la recaudación por la tasa de terrazas será menor en 2017 que en 2016, pasando de 9,5 millones de euros a 7,8 millones lo que supone una reducción del 14,4%. En el caso del impuesto de Actividades Económicas la disminución en la recaudación se estima será de 219.673 euros, pasando de 97,9 millones euros a 97,7 euros.